LECT.DIARIAS 1984 | Lugar/Ort:
Fecha/Datum:14/12/1984 | Otros Lugares/Weitere Predigtorte:
| Año Eclesiástico/Kirchenjahr: | Libro Bíblico/Buchbezeichnung:1 Corintios 10: 10-11/ Ezequiel 18: 25 | | |
Skopus: | | Lect.Diarioas 1984-1 Corintios 10:10+11;Ezequiel 18:25 "No murmuren, como algunos de ellos murmuraron y perecieron por el destructor. Y estas cosas les acontecieron como ejemplo, y están escritas para amonestarnos a nosotrs. - Y ustedes dijeron: No es recto el camino del Señor, oigan ahora, casa de Israel: ¿No es recto mi camino?, ¿no son nuestros caminos torcidos?"
El tiempo de adviento es tiempo de penitencia. El camino hacia el futuro, preparado por Jesucristo para nosotros, no solamente es oscurecido por problemas y dificultades que nos vienen de afuera, sino por nosotros mismos. Nos resulta muy difícil confiar totalmente en Dios. Queremos hacer nuestros propios caminos. Desconfiamos más en las palabras y los hechos de los grandes de este mundo. Viviendo en tiempos de angustia y de miserias no queremos aceptar que mucho, casi todo, es resultado de nuestra culpa, acusando a Dios. Decimos: si Dios nos ama, no puede permitir a toda la injusticia. Nos enojamos porque Dios ama donde nosotros odiamos o porque él castiga donde nosotros ayudamos. Tenemos ejemplos en el Antiguo Testamento de que Dios castiga duramente la desconfianza y la murmuración. Nuestro texto del Nuevo Testamento se refiere a un juicio contra su pueblo y nos exhorta a no querer ser mayores o superiores que Dios mismo, pues así no alcanzeremos el destino de nuestro camino: el mundo nuevo. Hacer penitencia significa empezar a vivir en conformidad con la voluntad de Dios.
|
|