1 Außergewöhnliche Gottesd.- 25 | Lugar/Ort:Aldea Protestante
Fecha/Datum:25/10/1970 | Otros Lugares/Weitere Predigtorte: Reffino, 21-2-1973 | Año Eclesiástico/Kirchenjahr:Día de Juventud de ER-ER-Jugendtag | Libro Bíblico/Buchbezeichnung:Juan 6: 66-69 - Johannes 6, 66-69 | | |
Skopus: Estarse en la cercanía de Jesús. | | 1 Außergewöhnl.Gottesd.25-Día Juvent.ER-Juan 6,66-69 "Desde entonces, muchos de los que habían seguido a Jesús lo dejaron, y ya no andaban con él. Entonces Jesús preguntó a los doce discípulos: ¿Quieren ustedes irse también? Pero Simón Pedro le contestó: Señor, ¿a quién podemos ir? Tus palabras son palabras de vida eterna. Nosotros ya hemos creído y sabemos que tú eres el Santo de Dios."
En nuestro texto vivimos la realidad conmovedora que una parte de las personas habiendo puesto su confianza en Jesús de Nazaret y seguiendo a El, ahora es desilusionada y terminó su amistad con El. ¿Qué se realizó? Las personas vinieron a Jesús con la opinión que sus pensamientos de Dios, de piedad, de su posición privilegiada como pueblo de Dios entre otros pueblos serían afirmado por El. Esperaron que El diga a ellos: Todos ustedes son hijos excelentes de Dios, nada falta en su piedad de Ustds., son en conformidad con la voluntad de Dios. También yo, Jesús de Nazaret, he de aprender de Uds., son un ejemplo para mí. Pero, en lugar de esto, debían oír de su boca la palabra terrible: "¡Serpientes! ¡Raza de víboras! ¿Cómo van a escapar del castigo del infierno por el actuar pío?" Por eso, se han enojado de El, tampoco querían saber nada de su hacer y hablar. Otros, en cambio, tenían sus ideas de Dios y de su actuar, en medio del mundo, también de su ayuda para nosotros en la forma de un mesías, y vinieron con alegría a Jesús, llamándole, Mesías de Dios. Y ¿el resultado de este encuentro? La opinión que este Jesús de Nazaret no responderá nunca jamás sus ideas del cumplimiento de sus esperanzas por Dios. Más tarde, estos dos grupos de seguidores desilusionados de Cristo se unieron con todos los otros enemigos de El con el grito: "¡Fuera, fuera con este Jesús! ¡Crucifícalo! ¡Crucifícalo!" Los disgustados y los desilusionados y enemigos de Jesús no querían renunciar de sus ideas de Dios, de su pueblo, de su piedad y de un mesías y negaron lo que Jesús hizo y la forma en que se presentó. A este Jesús de Nazaret ellos no aceptaron. Sabemos que en la cristiandad de hoy vivimos en una situación semejante: "Desde entonces, muchos de los que habían seguido a Jesús lo dejaron, y ya no andaban con El." Muchos son disgustados y desilusionados en el tiempo de hoy de la fe cristiana, de las congregaciones cristianas, reconociendo que su fe, su actuar como cristiano y su piedad, recibida como tradición de sus padres, no responde a la testificación del Evangelio de Jesucristo en las Escrituras Sagradas. Un cristiano cansado, perezoso, orgulloso o avaro hoy en día no puede vivir más según su fe cristiana, porque esta fe pide una obediencia total de un creyente. Un poquito de cristianismo es siempre una absurdidad completa. Se puede creer solamente en una manera total. Hoy en día también sabemos que nuestra fe cristiana no solamente tiene interés para una vida después de la muerte, sino nuestro Señor Jesucristo quiere renovar ya nuestra vida en este mundo, con la colaboración de sus discípulos, de sus cristianos. El mandamiento del amor a Dios siempre está juntado con el del amor a nuestros prójimos. Y este último es la suposición de una vida humana verdadera para todos los seres humanos. Este saber es un escándalo para muchos cristianos; piedad, sí; tradicionalismo, sí; amor a los prójimos en la realidad de los días de la semana de nuestra vida, no; y otra vez, no. Por esta realidad triste, muchos cristianos en el tiempo actual han negado ya su fe cristiana, saliendo su congregación cristiana. Todavía, nosotros, tú y yo, como los doce discípulos de Jesús de Nazaret, estamos en la cercanía de este nuestro Señor, estamos en la congregación, estamos presente en este Domingo de la Juventud Entrerriana, en este culto, pero también nosotros somos preguntados: "¿Queréis iros también?" ¿Queréis iros también, recibiendo un empleo en Buenos, en una vida sin la tutela de vuestros padres? ¿Queréis iros tambien si se espera en el futuro de nosotros, cristianos, más sacrificios pecuñarios y temporales que hasta hoy? ¿Queréis iros también si no solamente la Iglesia Católica Romana se cambia siempre más, sino también nuestra Iglesia Evangélica del Río de la Plata en una manera fundamental? ¿Queréis iros también, reconociendo que en la fe cristiana hay siempre la decisión: O mi voluntad o la voluntad de mi Señor, o mi felicidad egoísta o la vida humana de todos los otros? ¿Queréis iros también, habiendo confesado en el día de la CONFIRMACIÓN vuestra fidelidad a Jesús? Jesucristo, preguntándonos en el día de hoy: "¿queréis iros también?' y sabiendo la incredilidad e infidelidad de los muchos, tiene la gran esperanza que nosotros andaremos en el futuro con El también, que daremos la misma contestación como el apóstol Pedro: "¿A quién podomes ir? Tus palabras son palabras de vida eterna. Nosotros ya hemos creído y sabemos que tu eres el Santo de Dios." Para todos nosotros el día de hoy fuese un día significativo, si podríamos renovar y afirmar nuestro SÍ a Jesucristo con su Iglesia, dado por primera vez publicamente el día de la Confirmación. Con este SI tenemos una certitud muy grande que viviremos en esta fe cristiana aún sorpresas por sorpresas. No solamente recibiremos la ayuda necesaria para nuestra vida, sino daremos esta ayuda también a otros. Recibiremos también la ayuda, estando cansados y débiles, como el apóstol Pedre ésta recibió: ¿Queréis iros también? No y otra vez: no. Sin Ti andaremos. Señor, en nuestra desdicha y condenación y fin terrible.
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